El cuerpo que habitamos: sensaciones y sentimientos en movimiento
La danza, el movimiento y el sonido nos permiten habitar nuestro cuerpo con mayor conciencia y encontrarnos con las sensaciones y sentimientos que se mueven muy adentro. La propuesta inicial fue moverse y danzar en el agua, en la nieve y en la arena…. qué sensaciones registramos en cada caso? dónde nos movemos más a gusto? … y más fácilmente?…qué sentimientos nos despiertan el placer y la alegría o bien la incomodidad y el dolor que vamos encontrando al danzar en cada “espacio”?
Luego, la invitación fue a imaginar un paisaje en el campo y desplazarse sobre la hierba verde y suave… estamos allí!….en el bosque, en las montañas…dondequiera que deseemos… Encontramos un animal que nos llama la atención… nos acompaña…caminamos a su lado, vamos captando sus movimientos…y entonces nos movemos con sus movimientos…cómo son?…rápidos o lentos? suaves o enérgicos? fuertes o débiles? qué nos inspira? nos invita a seguirlo?…podemos hacerlo?… a dónde nos lleva?
La siguiente propuesta: Ser ese animal!…ayudándonos con máscaras, telas, instrumentos… podemos incluso imitar su sonido o el ruido que hace al caminar? …
Como cierre, encontramos un compañero y, a través de la danza y el sonido, no presentamos: Soy ese animal ahora!. Cada uno danzó un tema y el otro tomó elementos de su danza para devolvérselos como espejo… Con un último tema compartido, cerraron la Danza..! (Fueron las primeras propuestas del taller del 17 de julio en Luz de Luna)
Este poema de Rumi nos acompañó antes y durante el taller… GRACIAS!